JESÚS Y
SU MINISTERIO DEL
PERDÓN… (Lc 23:33-43).
El perdón es sin duda uno de los valores cristianos de mayor
exigencia al punto de confrontar las fibras más profundas de nuestro corazón y
sus emociones… Que mejor escenario para ello que la Cruz (así inicia este relato en el Versículo 33). Quienes comparten
con él la agonía del castigo dividen sus opiniones frente a lo que está pasando
con Jesús, pues en nuestra perspectiva reflexiva puede sonar injusta pero en la
visión inmediata del suplicio y sus características el resultado es otro… Al pender de la Cruz el
Salvador continúa abogando por el perdón de sus verdugos que es también el
nuestro ya que nosotros contribuimos a su Cruz. Cada vez que Dios perdona en su
infinita Misericordia está Redimiendo tanto el Pasado como el Presente de la Humanidad, su perdón es una acción Salvífica
concreta y nos muestra como el Ministerio del perdón es un Acto de Fe en la Humanidad, esto
quiere decir que el propio Jesús confía en nuestra capacidad de reconocer y por
ende necesitar el perdón así como brindarlo a otras personas.
Jesús fue despojado de todo cuanto tenía menos de su Amor por nosotros (Sal 22,19) de
esta forma nos da ejemplo sobre la necesidad de desprendernos de cualquier
atadura para avanzar en el “camino” de nuestra madurez espiritual… Su Humanidad
se despojó de cuanto no era indispensable pero que muchas personas ni siquiera considerarían
la posibilidad de soltar sus seguridades
terrenas (Is 53,12) nos recuerda la causa de la muerte del Salvador.
Lucas intencionalmente se aparta de los
otros Sinópticos al presentar las actitudes de la “muchedumbre” que aquí más
que hostiles se muestran curiosos sin
que ello implique Solidaridad con el que sufre. Muchas veces vemos tanto
dolor en la Sociedad que ya no nos sorprende y mucho menos genera en nosotros
actitudes solidarias con el Sufriente, en
esta perspectiva es urgente reconocer en el otro al hermano, al amigo, al
visible en nuestras vidas. El mundo actual se especializa en hacer Invisible el sufrimiento del otro y
todo lo reduce al aprovechamiento de oportunidades y “sabias decisiones”, es
como emplear un “paliativo” para nuestra Conciencia fraterna (Versículo 35)… En cuanto a la declaración del llamado “buen
ladrón” es sin duda una afirmación de carácter político-religioso en los
cuales ha girado todo el “proceso de Jesús” ese llamado de su Realeza (Rey)
implica una “Sabia” decisión de aquel hombre por buscar alivio a sus penas y la
posibilidad de “enmendar” su vida… La respuesta del Salvador es en esa
dirección “Yo te aseguro hoy estarás
conmigo en el Paraíso” (43) Jesús
atendiendo a la Conciencia judía le ofrece lo que podemos equiparar a la
Salvación, es decir, el lugar de encuentro con los Patriarcas del (A.T) sin
sacarlo de su contexto pero iluminando su entendimiento sobre quien tiene la
Autoridad de entregar semejante “premio”…
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