RACIONALISMO TEOLÓGICO… FE Y
CIENCIA. HERENCIA DE LA
ESCUELA ANTIOQUENA.
INTRODUCCIÓN.
Los albores del Siglo IV resultan
bien atrayentes en el desarrollo de la teología como tal. La Escuela de Antioquía se caracterizó por ser el
más formal ejercicio teológico como tal, desde luego asociado a teólogos de la
talla de Luciano de Antioquía, Pablo de
Samosata, Juan Crisóstomo, considerando también que Arrío, fue instruido por
Luciano. Esta escuela se distinguió o caracterizó por su enfoque fundamentado
en el Racionalismo aristotélico en clara oposición a la Escuela de Alejandría que
seguía la corriente platónica… Es interesante como el Racionalismo griego es
determinante en la concepción cristiana teológica de esta Escuela. Es
importante conocer las tradiciones que fundamentaron nuestro ejercicio
teológico ya que gracias a estas escuelas la Iglesia avanzó
ostensiblemente en su Ministerialidad
determinando con ello los fundamentos tan importantes como por citar la Cristología, la Trinidad, el carácter de
las Ordenes Sagradas y el Canon de las Sagradas Escrituras así como su
Hermenéutica y Apología. Estos principios
se asumieron a cabalidad sin descontar como es natural las diferencias
entre ellas como iniciábamos esta pequeña introducción. La Escuela Antioquena
abre las puertas a la Racionalidad y la concilia con las Escrituras y su
contenido interpretativo sin caer en los excesos de la Escuela Alejandrina. Resaltemos
que los Antioquenos elevaron las consideraciones mitológicas según la
concepción aristotélica (para Aristóteles la teología era asunto de mitos y
leyendas de los dioses griegos) y al llevar su Filosofía a la praxis sublimaron
el ejercicio alegórico de las Sagradas Escrituras hasta convertirlo en Ciencia.
VISIÓN CRISTOLOGICA Y SOTERIOLÓGICA.
Empezamos este segmento afirmando
que la TEODICEA (Leibnitz 1646-1716) empleada como subespecie de la Metafísica
(apropiada definición) de la que parte el propio Agustín de Hipona y antes esta
Escuela (Antioquena) es seguro puesto
que la aproximación de esta definición que trasciende el contenido natural de
la reflexión que nos lleva a suponer la incorporación de la Racionalidad en el
aterrizaje de la Doctrina de nuestra catolicidad. Estamos afirmando que la Metafísica
encuentra su nicho en la Demostración
racional del valor de las Sagradas Escrituras y la Naturaleza Humana que se
concilia perfectamente con la Divina en el Redentor. La expresión de las propiedades
el ser que confluyen en María como es lo humano y lo divino. Es aquí donde encontramos el énfasis
que hacen los Antioquenos que no solo aterriza la Naturaleza Humana del
Salvador sino que asumen la continuidad histórica de su Encarnación al punto de
Espiritualizarla en la Humanidad misma… Es
como si afirmáramos no solo que el Logos tomó carne del seno de una Virgen sino
una fórmula más Antropizada posible en su Dialéctica lo que nos permite suponer
positivamente que el VERBO—HUMANO establece este nexo con la historia sin perder
de vista su realidad trascendente y sin que prime la naturaleza Singular del
propio Jesús, es decir, que los antioquenos hacen toda la fuerza posible en la
Humanidad del Redentor y su plena sujeción al Verbo en la Encarnación. No es una definición adopcionista es
mejor aún, un ejercicio que reconcilia el Misterio con la realidad Humana del
Hijo de Dios y por ende de su Madre la Virgen María… Para los antioquenos la
realidad percibida como tal es Inteligible lo que nos supone que no se queda en
la sola exposición de la Idea sino que llega al objeto mismo de su realidad, es
decir, conocemos a Dios por su Creación y por su Revelación sin que lo bello y
perfecto nos distraiga al punto de olvidar a su Hacedor.
Esta es sin duda función de su
conocida Teodicea que hace todo intento partiendo de su Racionalidad.
Para conocer, el ser humano necesita de su entendimiento (Intelecto) este aproximativo pero dinámico Realismo le permite a esta Escuela -cuya
base estaba el Siria- acercarse sin
desmedro de la Naturaleza Humana del Salvador a los principios y fundamentos de
su Revelación en y por las Sagradas Escrituras. Nuestro entendimiento permite y
permitirá que conozcamos las cosas como
estas son y se expresan de formas y modos inteligibles, aquí un atributo de
nuestra Inteligencia también al servicio
de nuestra Fe y Espiritualidad Anglicana.
Estamos afirmando que la Esencia de
las cosas que observamos o interiorizamos permanece tal y como es en verdad de
su composición orgánica o química si es del caso. El Hiponense se aparta un
poco de esta Escuela cuando supone el ejercicio de la Fe como único medio para
evidenciar la Revelación de Dios términos también valederos en la teología de
todas las épocas…
Retomando el tema, la Metafísica aristotélica
marcará el derrotero de esta Escuela y el criterio de su racionalidad, cómo y en cuanto tal,
obra del intelecto y fruto de la Luz o Revelación Divina. Ya no suponen ellos
como los antiguos griegos la presencia de Mitos fantásticos para expresar una
realidad ininteligible por la sola exposición de sus conceptos sino la
capacidad de llegar a la Revelación por la Gracia que potencia la Racionalidad
y al ser humano como Sujeto de ella. Esta afirmación la hacemos desde la
perspectiva de una Realidad que posee o
tiene entidad propia que nos
permite conocerla. En esta dirección
es posible entender el complemento conceptual creado por la Escolástica y
particularmente por Tomás de Aquino. Quien acude sistemáticamente a la Intencionalidad
del Conocimiento asunto poco tocado o
anexado por los Antioquenos…
El CONOCIMIENTO en la perspectiva del racionalismo aristotélico hace
nuevas ideas a partir de lo conocido o si es posible emplear el término
revelar, para indicar con ello una muy particular concepción de la Identidad de
la Idea tratada o dilucidada. Las ideas van más allá de si mismas lo que
también permite en orden a la Teoría del Conocimiento enfilarlas al Objeto
conocido. Desarrolla así una especie de Empirismo que parte de la percepción
del Intelecto donde se crean las Ideas como tal… En cuanto a la teología la
experiencia como una acción eminentemente trascendente de la Fe de quienes
actúan en la reflexión es el fundamento de nuestra convicción… Las Sagradas
Escrituras nos acercan al Dios que se revela y da a conocer en atributos su
Nombre Santísimo, es decir, más que un
Nombre las Escrituras nos hablan de un Dios que se manifiesta por medio de su
perfección y que por su infinita Misericordia se hace aprehensible para que el
ser humano en sus categorías
cognoscibles bien limitadas pueda conocer algo de su Gracia y Amor. Es la única
manera como la Esencia Divina es conocida
o al menos intuir lo que no es… recordemos que cada don expresado nos
remite a su fuente en este caso a Dios mismo… La Biblia nos revela algo de su
Majestad y Poder. Si bien podemos captar la esencia de muchas cosas, Dios por
obvias razones esta fuera de esta percepción. En cuanto a las Ideas sin duda que los
antioquenos no están tan distantes de las sentencias nominalistas al considerar
que las Ideas de la Creación están en la Mente de Dios, es decir, que Dios al
“pensar” Crea todo y sostiene todo (Justificación). La Suma perfección de Dios
es la Causa de todo cuanto Existe y como aportaría posteriormente el Hiponense “todo posee en sí mismo la semilla de lo
que será luego” sin ser panteísta el Hiponense deja el principio de la
Evolución que Siglos después los
naturalistas ingleses tomaran, incluso en el pensamiento del propio Hooker.
Los antioquenos desarrollaran una
influencia bien ganada en la Hermenéutica la cual se nutrirá de la Ciencia
heredada de la Tradición griega, es posible también asumir que los procesos por
los cuales la interpretación Bíblica evolucionó a partir de estas escuelas se
definió desde la conocida perspectiva de:
·
Necesidad
edificante.
·
Reflexión
pastoral.
·
Espiritualidad.
·
Perspectiva
de la Fe.
A groso
modo son las enseñanzas que estas escuelas y particularmente la Antioquena
asume de la interpretación Bíblica, superando así a la Escuela Alejandrina. Ya los santos PP. De la Iglesia y particularmente en
Occidente el Hiponense asume este método como
altamente necesario en la Misión de la Madre Iglesia… En la actualidad
el legado Antioqueno se siente con particular fuerza en la Iglesia Ortodoxa que
junto con los santos PP. Capadocios salen al encuentro de la rectitud y
fidelidad a la Iglesia en su Hermenéutica y Exegesis… Es el caso puntual de uno
de sus hijos más ilustres estamos hablando de Juan Crisóstomo o Boca de Oro. La
senda que marca esta Escuela es de suprema importancia en la desmitificación de las Sagradas
Escrituras donde desafortunadamente y con mucha fuerza en el hoy de nuestra historias muchas
personas ven un Signo reparador o
contestador de sus requerimientos. Las Sagradas Escrituras son y serán Palabra de Dios revelada al ser humano bajo
los conceptos que nosotros podemos reflexionar y venerar como explícitamente
signos de la Voluntad de Dios… Al respecto sobre el Verbo y el
Logos encontramos que esta Escuela
se traza en una profunda reflexión que desea superar los mismos postulados de
su maestro Luciano al plantear la posibilidad de conocer y asumir las dos
Naturalezas del Señor y como estas cuando se asocian perfectamente sin con ello
implicar la Subordinación de la Humana a la Divina. Quedó corto en su reflexión
a la espera de nuevas posibilidades Idiomáticas como buscó concretar el
Hiponense al afirmar: El Verbo de Dios
tomó carne en el seno de una Virgen y ella aceptó ser Madre, primero en el
corazón y luego en su vientre… también es posible afirmar que esta Escuela
tomó de los Alejandrinos y Capadocios el principio de la Hipostasis como lo expresaría Basilio
el Grande. La Cristología se nutre
incesantemente en la misma condición de la Humanidad de Jesús como observamos
antes. Esta experiencia será definitiva en la Iglesia para luchar contra arrío y Nestorio Patriarca de Constantinopla
año 428 (este último se recuperó en
el Concilio de Calcedonia año 451) y la
dificultad por aceptar o asumir la
divinidad del Redentor del mundo. En cuanto a Nestorio planteaba la necesidad
de despojar a María de su Theotokos por
Christotokos, intención de Nestorio era simple, reconocer y solemnizar que
María no engendró la Divinidad sino al Hombre unido inseparablemente a ella
(esta postura enfrentó a la Escuela de Alejandría con la Antioquena). Sin duda
alguna fue apoyada inicialmente por los antioquenos que defendían al Jesús Histórico. Para nosotros la
dificultad no radica en la sentencia sino en la visión de la relación Verbo—Alma Racional de Jesús… Es decir,
que efectivamente fue tal la Unidad en Jesús que no podemos hacer algún tipo de
distinciones al respecto, pero sobre todo debemos considerar que la Hipostasis establece
hasta en el plano lingüístico la imposibilidad de llamar sin relación alguna a
Jesús Hijo de María o a Cristo Hijo de Dios… Desde esta perspectiva decimos
como dicen los santos PP. De la Iglesia:
En la Virgen Madre el Verbo Eterno
Informó plenamente el Alma Racional de Jesús, luego, Jesús y el Verbo Eterno
son UNO y no más de UNO. No se
presenta una especie de Subordinacionismo de naturalezas (Divina y Humana)
incluso siguiendo la tradición y sus definiciones tampoco es posible suponer
que la Voluntad Humana de Jesús nunca actuó, pensar así es un escrúpulo que
busca divinizar la Persona (no como
verdad de Fe sino como Mito) de Jesucristo N. Salvador… Pero que en realidad limita la Hipostasis y
conduce a suponer con Arrío que lo que nació del Vientre de la Virgen Madre es
aparentemente Dios pero en realidad parecido a este (reduciendo al Salvador a
un súper-humano nada más) o determinar cómo aparente su filiación Divina.
La Escuela de Antioquía fue la pionera en la
consideración ya reconciliada de la Divinidad y Humanidad del Salvador,
consideración que fundamenta la comprensión misma de la historia y su derrotero
mediante los eventos contemplados en esta… Lo anterior nos lleva a deducir que
su trabajo a más de reflejar la especulación teológica también es principio de
su Realismo filosófico y complementado con su postura Empirista y
Gramatical que los lleva a crear un Dialéctica que no deja escapar detalle alguno referido a
la formulación de sus Tesis sin que con ello el absolutismo de sus postulados
desaparezca, por el contrario los argumenta con mayor Realismo… En los Antioquenos la presencia de la
Humanidad en el Redentor es factor Total y Talizante a la hora de hablar de la inclusión de Dios en la historia
de la humanidad y por extensión en la Creación. Esta inclusión nos permite ver
en esencia su Realismo y por qué no su Empirismo
Intuitivo al suponer la inclusión de
Jesús como Dios y Hombre en la
cotidianidad de un mundo creado y justificado por Dios cada segundo y donde las
acciones de Jesús nunca se apartan de su Naturaleza Humana, todo lo contrario,
la Sublima e Idealiza. Los Antioquenos rompen con cualquier posible Antítesis en la elaboración doctrinal
ya que conciliaron sin dificultad la figura Humana y la divina del Salvador en
un Discurso que nunca generó dudas al respecto, sin con ello descartar las
posturas más radicales de su Dialéctica como citábamos antes… La
Antítesis como oposición entre postulados no determinó absolutamente nada para ellos, creemos antes
lo contrario que la Unidad esencial de su Doctrina y la Estética de la misma siempre
estuvo a salvo. La polémica suscitada por Nestorio fue resarcida rápidamente
conforme se manifestó la Iglesia en Calcedonia el 451. La Tesis sostenida es sin duda la postura de la Iglesia en oriente sobre la naturaleza Humana y Divina del Salvador
que para ellos es tan grande que una
Mujer difícilmente tendría parte decidida en la Encarnación, no al menos, desde
la perspectiva de la Persona Divina existente. Nestorio solo plantea una vez
tomando su principio, la maternidad humana de María pero tampoco es ajeno a la conexión
con la realidad Divina (escrúpulos teológicos).
NUESTRA
REFLEXIÓN TEOLÓGICA DESDE
EL RACIONALISMO.
Hemos
escuchado expresiones populares que refieren la atención que las personas
conceden a sus problemas y que célebremente recalcan en estos términos: No le dé mente al problema, resulta
interesante como la naturaleza del problema es descartada inmediatamente se
confronta su complejidad y como el discurso especulativo que aportará a su
solución es obviado por todos… El problema planteado desde solo una vía genera
aún más confusión, por eso es importante las fuentes a la hora de discutir
aspectos de nuestra teología. La Estética de la situación que convertimos en
problema pasa por la aprehensión de
fórmulas mediáticas para solucionar la disputa o problema, se hace necesario la
confrontación que solo nos ofrece como postulado la Antítesis
como modelo que enfrenta las distintas vertientes sin que ello implique
dicotomía más bien la posibilidad de re-plantear la cuestión desde ángulos
distintos que a la postre enriquecen la solución cómo y en cuanto tal. Sobre el Racionalismo
es claro que aun el ejercicio dogmático necesita de años y más años para
ser convertido en lo que expresa su naturaleza conceptual, es decir, verdad que
no necesita ser demostrada. El gran peligro de la disertación sin argumentos
radica en la creación del Mito como expresión
Gramatical, desde esta perspectiva es plausible que la escasa habilidad
para responder al cuestionamiento termine cambiando la idea inicial o la
veracidad de esta… La Expresión gramatical conlleva el manejo del Lenguaje y su
accesibilidad, es decir, expresar la Doctrina bajo los parámetros comprensibles
o asimilables. Este último ingrediente sobresale en la Escuela Antioquena
gracias a Teodoreto de Siria y desde
luego en Occidente gracias a San Agustín
de Hipona y San Jerónimo. Aun en nuestro presente la nota esencial de la Hermenéutica
se congrega en orden a la transmisión de la Idea inicial que el Texto Sagrado
de Tradición desea comunicar, este mensaje bien puede sufrir las consecuencias
del cambio de la mentalidad latente en la Cultura y el ejercicio pro-activo de
esta. La Comunión Anglicana al
introducir la Razón en la praxis de
sus postulados y materialización de la Fe y la Tradición (santos PP. De la
Iglesia) procuró la Identidad sustancial de la teología con la posibilidad de
asumir y Re-leer muchos de sus contenidos y sujetarlos a las Escrituras. La
Razón no implica axiomáticamente la voluntad de cuestionar todo sino y en
lectura positiva de Encontrar el valor
implícito en sus enseñanzas sin que medie la necesidad de Re-escribir estas… Cada
que decimos necesitamos re-escribir la Doctrina estamos diciendo que el modelo
vivenciado debe ser modificado según convenga
a una porción del Colectivo y no necesariamente a la totalidad Eclesial
donde vivimos nuestra explicita Comunión. En cuanto a la Metafísica de nuestros
enunciados es claro que la posibilidad se convierte en una acción gramatical en
potencia, es decir, que el valor doctrinal depende no solo de la interpretación
del Presente o su vivencia sino de la conexión cíclica con la Historia o pasado
que justifica su presente. La Metafísica en las categorías del Ser Creado a
Imagen de Dios nos habla de nuestras
relaciones y cualidades estableciendo una especie de marca o genética
espiritual que nos une a la revelación y a su mensaje como quiera que la Madre
Iglesia exprese en sus enseñanzas las verdades que así referimos como experiencia vivida.
No podemos
convertir la Resurrección en una
mera recordación o recordatorio histórico de un suceso que en su componente
trascendente supera nuestra propia historia. La actualidad del fenómeno llamado
Resurrección queda inscrita en la Voluntad de Dios Padre y sus nociones llegan
a nosotros por la presencia Salvífica del Dios Espíritu Santo y cuya Causa Eficiente forma una especie de
Hipostasis histórica en el Jesús de
nuestra historia… Ahora existe quienes hablan de una Resurrección personal
cargada de la subjetividad interpretativa desconociendo el principio
Escrituristico como tal. Se fomenta la praxis de una espiritualidad tan
personal que no se une a la realidad Eclesial y por lo tanto a los Medios de la Gracia. Para ilustrar este
segmento cito una expresión muy popular: No
asisto al templo porque oro en casa pues desde nuestra perspectiva el
problema no radica en hacerlo en casa ya que es una invitación constante de la
Iglesia a orar y santificar nuestros hogares. La dificultad idiomática la
encontramos en el enunciado donde se
desliga el orante de la Comunidad de Fe y pasa a convertir los dones de la
Gracia en un artículo de total Autosuficiencia al punto de desconocer la
Realidad Salvífica del Colectivo.
No cuestionamos el Pensamiento independiente solo asumimos que en la intríngulis del
compartir la presencia del otro es Insustituible.
La misma Identidad humana nos atestigua que la referencia inmediata a cada
uno de nosotros es nuestro semejante y que en tal postura sucede como la Huella
o impronta con las mismas propiedades pero con la natural distinción de su
singularidad que atiende a su Naturaleza Racional y Emocional… El Jesús Histórico no puede ser una
definición de humanidad apriorística ya que su manifestación desde la
perspectiva biológica tomó cuanto fue y vivió entre nosotros. Su Metafísica en
todo igual a nosotros, su condición de humanidad en todo igual a la nuestra. Es
precisamente donde el ejercicio del tiempo y la consideración de su condición
Divina lo distinguen esencialmente de cada uno de nosotros. La distinción es
fruto de su Naturaleza como Persona Divina. Si retiramos del Redentor estas
connotaciones entonces cabe “duda razonable” sobre su Identidad y origen. El
Creyente precisamente vive esta particular dinámica de reflejar en su ser las
huellas del Creador y su incorporación histórica en la Persona de su Adorado
Hijo. Para resumir la exposición simplemente diremos: Estamos formados de carne y hueso pero también de Eternidad. Contra esto último no cabe
posibilidad alguna de Antropizar al extremo la figura del Salvador y despojarlo
de su
trascendencia y filiación Divina como Hijo del Altísimo…
REALIDAD
ARTIFICIAL.
La capacidad de “navegar” en el mundo tecnológico
o
también denominado CIBER-ESPACIO no es más que una Realidad simulada con su
plataforma de dispersión al alcance de cualquier persona. La dinámica de la
Comunicación actual reclama de ella todo su protagonismo. El problema radica estrictamente
en la tendencia de hacer de esta realidad simulada la constatación sensorial única
y creer que la realidad recreada por ella es Autentica o Legitima. Es un mundo alterno donde todo es posible,
donde niños y adultos “juegan” a crear emociones y concepciones fantásticas de
su propia realidad, desde luego, es imposible luchar contra un mundo sin
ninguna exigencia y que termina recreando hasta posturas de Fe o desapego a estas entre su cada vez más
grande grupo de seguidores. Racionalizar la Fe o las creencias no supone solo
someterlas al concurso de la Inteligencia, también implica para nosotros sostener
y fundamentarlas de cara al mundo en el que actuamos. Se requiere ser
Inteligente para aceptar y vivir y materializar los cuestionamientos en praxis
de Fe y creencias… Lo CIBER es relativo a la destinación de una forma de
percepción sensorial que supera los
postulados anteriores a los fundamentos del Empirismo ya que traslada la
Experiencia a un nivel Supra donde los Sentidos están unidos a un número
cada vez mayor de personas en la misma función, es como ver la realidad desde ángulos
multicoloridos donde el ser actúa desde la percepción personal y pierde toda
noción de su encuentro real con el otro y su circunstancia.
Los Medios de Comunicación Masivos son la génesis
de este principio porque permitieron llegar hace años a un número creciente de
personas haciendo de la Información una masa que puede ser dirigida según sus intereses
como tal. La Misión de la Iglesia Histórica
se enfrenta a una realidad
totalmente nueva y por ende de distinta naturaleza frente a las Comunidades de
Fe llamadas coyunturales y cuyo modelo de difusión dista del histórico… El
Ciber-espacio se asume en la perspectiva de la META-COMUNICACIÓN y busca
los medios para ser recreada en la condición que necesita la comunicación para
llegar a su cometido sin que ello necesariamente implique la reflexión.
Existen cosas que no son negociables como
los principios de la historia Eclesial y sus fundamentos en la sique o memoria
del Colectivo y sus tradiciones. El mensaje de la reflexión teológica nos debe
conducir abiertamente a la posibilidad equilibrada de mejorar nuestro Rol en la
historia del cristianismo. Una historia que se transforma en Esperanza
para todas y todos los bautizados y es precisamente la realidad de nuestra
Fe la que matiza nuestra Espera con la
segura convicción de la manifestación de Dios en nuestras vidas. Esta manifestación
no se queda solo supeditada al Misterio
de Belén sino que se recrea
multiforme en la experiencia de cada uno de los bautizados conscientes de esta realidad
trascendente en la que está involucrada su existencia. La razón como instrumento natural de nuestra condición
de Persona Humana asiste a este
y todos los procesos por medio de los cuales establecemos relaciones a
todo nivel, desde lo básico hasta la complejidad de la explicitación de nuestra
existencia… La Fe construye su realidad y regula la aprehensión de la conciencia
sobre lo cotidiano, es decir, mientras más poderosa sea la experiencia de dios
en nuestras vidas y Ministerio mejores personas y ministros debemos ser. Una
vez más no nos referimos al Realismo apriorístico sino a la necesaria reflexión
que conlleva la praxis de nuestras creencias. Nuestra Fe es Cristocentrica pero
no deja fuera otros elementos que históricamente la enriquecen y le permiten
compartir naturalmente otros escenarios. Hace ya años que la Iglesia trabaja
por dar cabida a todos sus hijos y reconocer como valiosos sus aportes.
Queremos resaltar que el Ecumenismo es
uno de los fuertes en la Misión de esta Provincia donde todos tienen un lugar y
con mayor razón quienes han vivido
tradiciones hermanadas en el seno Eclesial. El Episcopal es Ecuménico por naturaleza. En este principio
incluimos nuestra cosmovisión ministerial. Debemos tener Noción de ser Iglesia Universal y no pensar en un
Ministerio solo personal o reducido a nuestro medio, somos y serán ordenados
para la Iglesia Universal. La construcción de nuestra realidad requiere de
mucho más que la posibilidad de figurar en los Medios masivos los cuales son
importantes pero ellos también parten de la necesaria Identidad a difundir en
sus principios. Nuestros principios o fundamentos son claros y contundentes y
necesitan ser vivenciados como la forma más concreta para comunicarlos. Nuestra
teología y su Racionalidad se expresan en categorías idiomáticas las cuales
manifiestan su esencia en la Metafísica o forma y deseo de comunicarse, es
decir, cada mensaje nuestro debe reflejar lo que somos y en lo que creemos. Y
es fundamental estar completamente seguros de lo que deseamos comunicar para
potenciar así las ideas a transmitir. Nuestra
Comunicación es necesariamente expresión de un contenido en categorías perceptibles.
CONCLUSIONES SOBRE LA CUESTIÓN.
Las
escuelas teológicas son en gran medida - positivamente hablando- las
responsables de nuestra madurez teológica. Ellas y sus iniciadores e inscritos
en su sistema de pensamiento buscaron siempre exaltar su Fe y tornar sobre ella un camino más fácil
para seguir y vivir… es decisión nuestra dejar sus enseñanzas a un lado o por
el contrario elaborar nuestro propio Discurso sin medrar daño en ello. Es fascinante
como la historia nos muestra los afanes y la intríngulis de estos hombres por
defender y vivir sus principios. No es posible acusarlos solo de
intelectualistas ya que la Doctrina es una manera hablada de vivir y manifestar
nuestra Fe. En la consideración de nuestra espiritualidad movidos por la
trascendencia vivimos la percepción de
un mundo mayor de lo que nos informan nuestros sentidos. Este concepto es la AUTO-TRASCENDENCIA que en el análisis de nuestras vidas y
acciones nos permite concluir que la
realidad percibida desde la óptica de nuestra Fe es aún mayor que la experiencia sensible que
poseemos y que nuestro conocimiento es insipiente pero luego será Total y
Totalizante. Asumir que Jesús fue hombre verdadero y Dios verdadero es un logro
impresionante de la naciente Antropología
trascendente Antioquena. También lo es su Cristo-centrismo y que hablar de
la innovación de desarrollar un Discurso gramatical para hacer evolucionar los términos
con un cierto Empirismo Intuitivo que puede sublimar la
experiencia académica y convertirla en lo que es expresión y sentir de Fe
Racional… La intuición teológica de nuestra Iglesia posee estas Vestigias o huellas de tal accionar.
Nuestro Discurso Gnoseológico está más cerca de ellos de lo que pensamos
puesto que se encamina en la Afirmación
de la Humanidad real del salvador y su Naturaleza Singular Informada por la
Naturaleza y Persona Divina y todo ello bajo el manto protector del Misterio de
nuestra Fe y rica Esperanza. Somos la continuidad moderna de estos discursos de
allí que nuestra historia bebe de su fuente que es Cristo y su Iglesia… Es nuestro deber conocer la raíz de nuestra
Tradición. Compartimos en esta dirección las palabras del Hiponense: Que nuestra mente revise cuidadosamente las
cosas que por Fe aceptamos y creemos.
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