NECIO… ESTA MISMA NOCHE
TE VAN A RECLAMAR LA VIDA.
La interpretación Lucana de una Riqueza (Lc 12:13-21) que raya en el absurdo de la negación de la Trascendencia
de la vida como Realidad Totalizante de nuestra existencia le lleva a
determinar en su critica el principio de Valía sobre los Dones y/o Recursos
materiales de los que siempre han gozado las Personas, Lucas pone en boca del
Señor una lección sobre el Orden de las prioridades y lo hace en el ámbito de
las disputas y conclusiones propias de aquellos que poco o nada interiorizan el
concepto de la VERDADERA RIQUEZA, no
está hablando de lo que el Mundo conoce por Bienestar, no está hablando del
Dinero que es capaz de enfrentar a hermanos por su posesión y disfrute, los
señalamientos del Autor sobrepasan cualquier otra posibilidad en este plano, está
más interesado en sopesar y descifrar el término de la verdadera Riqueza
aquella que no se marchita, se consume o
es robada… Como no recordar las palabras
del Hiponense: NO ES MÁS FELIZ QUIEN
TIENE MUCHO SINO QUIEN MENOS NECESITA, la posesión de lo material es apenas
un ejercicio natural en nuestro orden Socio-Cultural, lo que hace la diferencia
es la convicción de la vida Sobrenatural que pone el Recurso en su justa y
vital medida, no se trata solo de ideales ya que lo que más recordamos es la
Persona y no su Fortuna cuando verdaderamente le amamos o respetamos, la
preocupación del Salvador es clara, cuando determinar el valor de lo material
en un Mundo tan superficial y sensualista que solo percibe satisfactoriamente
lo que está en su dominio y gobierno, la insensatez del Rico está marcada por
la total ausencia de gobierno o dominio de sus pasiones que le llevan a suponer
un Bienestar seguro donde es imposible construirlo, nosotros solo administramos
no somos dueños de nada material porque existe la imposibilidad de conservar
ese dominio en la Trascendencia.
El Hijo de Dios no es Juez o Árbitro frente a las
motivaciones y aspiraciones materiales de la Humanidad, antes lo indicará sobre
la relación DINERO-CORAZÓN, la
Abundancia es Signo de su Bendición pero una riqueza que es imposible medirla
solo en la perspectiva de lo material, la RIQUEZA que nos describe en las palabras del
Salvador este Evangelio transita por los caminos de la Justicia y la Armonía TESORO
Y CORAZÓN caminan de la mano, como
la Gracia se une al Perdón y juntos son en sí un solo Don la Salvación. Estará en
manos nuestras buscar la Verdadera Riqueza y disfrutarla, y darle el Corazón a
la Trascendencia que anida desde siempre en nuestras vidas, esencialmente donde
estamos acumulando nuestras riquezas y sobre todo la CALIDAD de estas, no es
positivo correr en pos de lo material suponiendo que no es necesario nada más
esa postura solo construye POBREZA
ESENCIAL de-meritando la riqueza en
la fuimos creados por el Amor del Padre Dios en el Hijo y su Espiritu. La Formación es indispensable sobre todo en la
Axiología Cristiana asumiendo los Valores que el Evangelio pone a nuestro alcance,
la Riqueza es una gran Responsabilidad ya que ella puede convertirse en
Bienestar o perdición para muchos, la Injusticia aparece cuando solo lo
material nutre a la Persona y sus expectativas Existenciales. No existe mayor riqueza que el Amor de Dios
en la Persona Redimida. Quien se pone en manos de Dios será hábil y justo y
sus obras son y serán bendecidas abundantemente. LO QUE NO ALMACENAMOS EN EL CORAZÓN NO ES AUTENTICA RIQUEZA… PARA LO
DEMÁS ESTÁ EL BANCO.
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